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El fruto prohibido
nace en tu boca
y en el color de tu piel
En la playa te veo
lenta y parsimoniosa
mientras caminas y sonríes
bella
a los sones del viento
en el mundo de los horizontes
Es la melodía que se oye
en el gusto del sol
y su paladar de lengua de fuego
justo como vos
lirio de musgo y canela
en el imperio del mar
sublime
a los ojos de la admiración
Poema dedicado a Jem Wolfie
color gris
como la postal de la bahía
que toma la tarde
Tú no eres gris
tan solo un arcoíris
escapada de un sueño
con luciérnagas y abejorros que celebran tu desnudez
diáfana
como una gota de cristal
que entrega el amanecer
Es el encanto de tu beso
rozando mi piel
lo que me vuelve loco, antropomorfo
un caleidoscopio de miradas
en el seno de un valle terracota y canela
Poema dedicado a Ellen Willard
